8 feb 2009

Domingos de sueño y desesperación.

Los domingos, siempre me han traído desacuerdos como medio natural de mis días. Al parecer sin conseguir definirlo; con cada hora que va cambiado, siento un extraño sentimiento que desborda angustia.

Al parecer, mis emociones; están predispuestas para darse un largo descanso y no les apetece, trabajar por lo más mínimo, quizás como un pequeño regalo a mi constante gana de hablar en voz baja, me permitieron escribir. Siento que la semana se pondrá complicada, que la paz no será devuelta como tanto ansío.

Cada día me trae algo nuevo, pero estoy estudiando los días para hacerlos mejores, mi labor más allá de la teoría se ha convertido en algo bastante práctico; reconocimiento de emociones, detallar la estructura de cada conflicto e intentar darle directo al centro y no cometer errores previos, considero que hasta el momento lo hemos sabido manejar y aun tenemos tanto por aprender, reconocer, aplicar; mi criterio se basa en mezclar la esencia de la respiración inicial, con el trasteo del evento; improvisar motivos para apresurar el mismo y estabilizar el ambiente para conseguir el hecho. Aun tengo bastante labor, pero se tiene la suficiente fuerza.

Estudiando la fórmula exacta de la confianza; detallando hasta que punto es necesario gritar y permanecer en silencio, siendo de carne y sonrisas, entre llanto y confusión.

Al final, sigue siendo lo mismo. Aunque tenga un olor diferente.

Ahora mi intento, va de la mano en mantener mis lágrimas dentro de mis ojos y sospechar que mientras más ansío un descanso más tendré energía para hacer lo que deseo.

1 comentario:

LORDS de Ecuador dijo...

Man...buen estilo para expresar tu situaciones cotidanas...algo qu emuchos no tenemos...expresión y por eso nos quedamos encerrados en nosotros mismos...