31 oct 2008

Hasta cuando.

Reducción de lamentos, es momento de crecer, dejar las peleas absurdas de la personalidad que no se ha logrado definir como una misma; Destruirlo todo y empezar a construirlo desde el principio. Somos tan minúsculos como para definir un solo argumento sostenible por más de un par de semanas, cualquier estrecho sentimiento no es más un rezago de la incredulidad de nuestras acciones, ahora con la sentencia perenne de mantener una misma trayectoria para continuar con lo que inexplicablemente importa; no queda más que darle un traspié hacia el olvido y la ignorancia un estado. No quiero más deprimir y menos alegrar a nadie con lo siguiente, me esperan largas jornadas de resolver todo lo que deje pendiente y lo mejor de todo es que tengo la inconfundible gana de empezar a terminarlo.


No se puede comer lo que siempre se ha comido, no se puede mirar lo que ya se ha visto, no se puede vivir como siempre se ha vivido. En este instante, me resulta fastidioso seguir en la misma circunstancia de esperar por el bienestar, acaso no entendí que los angelitos no vienen en nubes y te arreglan todo con su sonrisa y sus buenas acciones; también hacen malas, también tienen derecho a portarse mal, también tiene un porque de hacer algo que no se ajuste a tus requerimientos; tal vez, por eso me agradan los sistemas, siempre tienes dos estados, funciona o no.... Simplemente eso, sino funciona lo reparas de alguna forma y continuas por la siguiente falla, hasta que ya no quede otra. Pero la fantasía de que todo pudiese ser así, ha llegado a cansarme.

No es búsqueda de felicidad, reconocimiento o algo por ese espacio vacío de tiempo. Al final sigo estando tan vacío como cuando empecé a crear este sitio, ahora aprenderé a co-existir con él y seguir haciendo las cosas en estado nulo. No tengo ninguna otra respuesta, ahora ni siquiera la busco o mejor dicho, la espero.

Es uno mismo, quien dicta la conexión con sentirse vivo o muerto en mi caso; siempre trazamos las disyuntivas asociadas a la realidad para tratar de mirar de frente los dichos que no nos acompañan. Como siempre tratando de resolver cada pequeña falacia que nuestra mente crea para distraerse, como un diccionario; todas las propuestas se abren directamente hacia el encuentro con el suelo; a sostenernos de una pierna, hasta de gritar glorificantemente porque nada de lo que es, ha sido cierto.

¿Los culpables?

Simple, siempre y casi siempre es uno mismo, no hay más de uno, porque gracias a la evolución solo tenemos un pensamiento a la vez, que lo podamos repartir en varias instancias es diferente. Le vamos haciendo saltar de una gran cascada, le decimos como sentarse, como mirar a cualquier mujer que nos sea de alguna forma atractiva, simplemente es nuestra mente y nuestro cuerpo que anda haciendo lo demás importante para seguir en pié; busco una propuesta para desconectar cualquiera de los dos, cualquier prescripción es valida, en estos momentos siento que cualquier cosa podría resultarme divertida, hasta el laborioso trabajo en el que me he metido, por andar descuidando tanto la mente como el cuerpo, el uno se dedicó a mirar los más recónditos aspectos del pasado y el otro a quejarse de todas las formas que conoció para hacerse presente. Por tanto, hemos llegado a un acuerdo; Primero levantar la economía que mantenemos para poder recuperar al cuerpo y segundo dejar descansar la mente, de tal cantidad de blasfemias que venia absorbiendo por sentirse un pequeño cayo de algún pié miserable.

Creo que dadas las circunstancias es inútil seguir perdiendo el tiempo en cosas que pierden totalmente valor, por la satisfacción de un rato; quiero algo más grande, algo que realmente me mantenga lejos de la constricción de músculos las noches por adelantar el futuro.

No se puede doler, de lo que siempre ha dolido.

Que termina molestando, agitando el espacio; nos roba concentración. No es suficientemente absurdo seguir bajo el mismo cielo todos los días sin siquiera verlo de frente, ya me es repetitivo el saber lo que sé, cuando no puedo hacer nada con él; Empecé esta entrada con el nombre de “Hasta cuando” porque cada día, voy observando como todas las tareas pendientes siempre se ven divididas en el tiempo por alguna casual situación; siempre tiene que ocurrirnos algo, de cualquier parte para simplemente distraernos en todos los conceptos y tener que desperdiciar todo aquel valioso tiempo en algo que hubiese llevado a algún efecto especial en nuestra cotidianidad.

Me siento a reconstruir el título, diciéndome que debo emprender el camino de “Hasta cuando me doy un tiempo para hacer lo mio”. Sé que uno de mis placeres es apoyar y fortalecer a todas las personas que han recurrido por mi actos, pero de la misma forma desconozco que tan bien les estoy haciendo tratando de facilitarles la vida cuando no logro ni siquiera facilitar la mía, al parecer; siempre la dejo para más tarde, pero cuando será el más tarde para mis objetivos por cumplir, ha pasado tantas atrocidades alrededor que no concibo una real conexión de que es lo que buscaba o quería en un inicio; el inclemente paso de crecer, de ser alguien que tenga algo fijo en la vida.

Hasta cuando es todo ese resumen de preguntas que me hago durante el trayecto a casa cuando voy en el auto, tratando de no fastidiar la calefacción por encender un tabaco porque todo lo que en la radio suena de alguna forma no llama mi atención; Tengo mi respuesta y estoy colocándolo en práctica, en está ocasión intento de forma inútil desdoblar cada una de los pensamientos que debía tener entre el día y que debía llevarlos a tener algún efecto bueno o malo en mi. Porque no es satisfactorio que las ideas se nos queden en el aire, deben sobrepasar todo ámbito de nuestro interior y estallar directamente en la frente cuando nos vemos en el espejo; No somos gente de distancias cortas, no podemos seguir manteniendo el ideal de que el mañana será mejor, porque así lo decidimos, porque así de grotescos podemos llegar a ser.

Aquí nadie logrará ganar nada, no se lleva la rubia del cumpleaños a la cama, no se ostenta una posesión, hablamos de quitarle la fantasía a las cosas y hacer realidad las que hicieron falta.

2 comentarios:

Tuchis dijo...

Q dice mi locuaz, pues de visita pa saludar y hacerme presente...
Estan muy bancan tus escritos
Saludos desde el mundo de los sueños

Tuchis dijo...

Hola saludos desde el mundo de los sueños